El copywriting no es magia, y yo no soy especial.

Pero, cuando entro en el papel de copywriter, me embarco en la búsqueda de una perspectiva única.

¿Y sabes por qué alguien debería escucharte a ti, en lugar de escuchar a otros mil?
Encontrar eso, es copywriting.

Pero…

“metáfora ≠ copywriting”

Si alguien te presenta un listado de recursos lingüísticos como “manual de copywriting”, recuerda: eso es Lengua de instituto.
El verdadero copywriting no consiste en sonar bonito, sino en entender, emocionar, persuadir… y lograr resultados.

Y si te han dicho que meter tus textos dentro de fórmulas, es hacer copywriting…

sinceramente, te han mentido (o no le han puesto el nombre correcto).

Porque eso lleva muuucho detrás.

Copywriting es la voz de tu alma, porque es la voz de tu marca.

Además, tiene un propósito de acción: compras, suscripciones, clics…

En este post quiero contarte qué es realmente el copywriting y por qué no se trata solo de escribir bonito ni de aplicar fórmulas.

Te hablaré de cómo construir mensajes que conecten de verdad con tu público, generen confianza y reflejen la esencia de tu marca. También compartiré por qué la investigación, la escucha activa y la estrategia son el corazón de un buen copy, y cómo todo esto te ayuda a expandir tu propósito de salud holísica a través de tus palabras.

 

Y hoy todos hablan de «copywriting»

 

Claro, porque ChatGPT lo chiva todo. Aunque… lo digo bajito:  muchas veces, lo chiva mal.

Y un secreto: la culpa la tiene eso de «hacerte tanto la pelota» cuando te dice cosas como: «Laura, esa es una idea brillante», «¡Qué hermoso y poderoso giro, Laura!»

¡Yo me parto!

Pero La palabra «copywriter» no enamora.

Por eso, antes que ponerme esa etiqueta, prefiero decir que me gusta potenciar la comunicación de mis clientes de salud integrativa para que conecten y ayuden a muchas más personas, porque esto se entiende mejor y emocionalmente, llega.

Además, yo también soy emocional y me llena escribir sintiendo emociones.

 

Aunque en copywriting, escribir es lo de menos

 

No intentes entenderlo todo a la primera. A mí, me llevó meses interiorizar conceptos.

Ahora escuchar activamente a mi cliente es lo que me da los mejores resultados.

Así que, mi consejo es que, si vas a escribir para tu negocio, revísate primero. Y revisa bien a quién te diriges antes de hacerlo.

 

Sin investigación, no hay copy que valga

 

Cuando terminé mi formación (allá por 2019), eso me quedó clarísimo.

Un día, un conocido me dijo:
“Tengo un cliente fisio, esta es su web. ¿Le haces el copy de la home? Gratis, claro.”.

Me había leído y le gustaba mi estilo, pero tuve que explicarle:
“El copy es investigación y escritura con fundamento. No puedo sacármelo de la manga».

Podría haberle hecho algo bonito, sí. Pero no lo hice.

No lo entendió. Y no le culpo. No es fácil entenderlo a la primera.

 

¿Ahora se sabe mucho de escritura persuasiva?

 

No, si no se sabe esto.

Ningún manual, receta o fórmula rápida sustituye el trabajo previo y estratégico de conocer y comprender profundamente el mercado, el producto y al cliente potencial.

Mucho antes de escribir, el copywriter pasa horas investigando, leyendo foros, escuchando clientes, detectando objeciones. Y lo hace porque de ahí nace la confianza.

 

Investigación interna y externa

 

Para que lo entiendas claro, la investigación la trabajo en tres frentes que me ayudan a conocer a fondo:

    1. Al receptor del mensaje o cliente ideal de mi cliente.
    2. Al cliente que quiere comunicar sus servicios y a estos servicios, claro está.
    3. Y a lo que se mueve fuera para no repetir (no clonar a otros).

Recopilar toda la información posible del cliente. Desde experiencia, hasta estadísticas y testimonios. Comentarios en redes y foros, e incluso entrevistas.

Y esto es importante: buscar qué objeciones enfrentan y a la vez, investigar competidores, o productos y servicios similares y a referentes del sector.

Construir mensajes que sostengan la confianza

 

Este es un proceso complejo, profundo y lleno de matices.

“Somos los mejores” no vende. La confianza se gana con datos, historias, pruebas.

Y si quiero decir que un servicio te transforma, antes debo explicar por qué esa transformación importa.
Cada frase debe justificarse y estar conectada con lo que el cliente necesita sentir.

Ahí está la diferencia entre un texto bonito y un mensaje que convence porque conecta con sus deseos, sus temores y sus miedos.

Validar, probar y ajustar

 

No me lanzo a la piscina si con un curso online, si veo que no hay demanda.
Primero veo qué cursos existen y cómo se posicionan. Así construyo la nueva idea o la nueva visión para conectar adecuadamente.

Ese trabajo previo ahorra dinero y frustraciones pero, casi nadie lo ve.

 

Intuición profesional + experiencia del cliente

 

No, no soy una sabelotodo.

Tú conoces tu sector y a tus clientes mucho mejor que yo.

Mi trabajo es escucharte y traducir lo que sabes en mensajes que funcionen.

Si me dices: “En mi sector eso nunca funciona”, yo tengo que escucharte. Porque tu intuición vale tanto como la mía.

Aunque en lo mío, mi criterio vale más.

Lo que el copywriting hace por ti

Me llamarás loca o exagerada, pero te aseguro que necesitas renacer para nacer como marca.

No es lo mismo, lo que eres y lo que tienes. 

Ser, lo profundo (mente, alma…), y tener, lo externo. Tú tienes un cuerpo que te envuelve y refleja.

Y en comunicación, eres tu marca, eres la personalidad que reflejas como profesional. Ahora adivina cómo lo construyes.

¡Exacto! Expresando con lo que se ve, tu materia prima (tus palabras).

Por lo tanto, con copywriting construyes desde ahí, desde lo que eres. Al expresar persuasión sincera, vendes, te das a los demás para que disfruten de ti.

Para entenderlo y aceptarlo mejor, cambia vender por entregar.

Y también cambia comprar por disfrutar.

Vender no es manipular, es entregarte a cambio de algo. Y comprar, es disfrutar de lo que alguien entrega desde la verdad.

Porque cuidado, cuando el copywriting es auténtico, nunca vende humo.

 

Tu marca crece contigo

 

Tu personalidad de marca evoluciona, igual que tú. Y el copy, se retroalimenta con ella.

 

Por eso, muchas veces, sabemos algo pero no lo integramos. Lo entendemos con la cabeza, pero no con el cuerpo.

El copy te ayuda a integrar, a crecer, a repensarte como profesional.

Cuando alguien llega a mí, lo primero que hago es una auditoría personalizada. Y si no tiene claro qué puede ofrecer como profesional, suele abandonar. Pero si hay intención y buen contenido dentro de su proyecto, se arranca, se ordena.

Porque el ser, es tu marca. Y el copy y la marca trabajan en equipo.

El peso de lo invisible

Lo más valioso de un copywriter no son las palabras publicadas, sino todo lo que queda oculto:

las horas de investigación silenciosa, las conversaciones profundas con el cliente, las validaciones y pruebas, las reescrituras infinitas. La entrega no es solo un documento, sino un proceso completo de acompañamiento y confianza.

El resultado final (una página de ventas, un correo, una campaña), es apenas la punta del iceberg.

 

Por qué no hago copy en todo momento

 

Porque no intento vender en todo momento. Intento conectar. Dar una idea, compartir una reflexión, crear un puente.

Antes de escribir, pregúntate:
¿Qué quiero decir? ¿para quien? ¿y por qué? ¿para qué?

Después escribe.
Y solo entonces, si quieres, busca ayuda o mejora. Pero no dejes que nadie cambie tu esencia ni tus pensamientos.

En resumen, ¿estamos dejando de pensar?

Escribir sin pensar no construye conexión. Y ese es el problema de la IA
Nos vuelve automáticos.

No necesitamos ir a cien y hacer mil contenidos (¿nos puede el placer de subir la dopamina?)

Cuando yo quiero ir al corazón de algo, pillarle la esencia, bajo el ritmo.

No hace falta más tecnología para crear, lo primero es saber qué y sobre todo para qué queremos hacerlo.

Y si pides que piensen por ti, ya no serás tú quien dirige con criterio. 

Después de esto, puede que el copywriting te interese más o valores más mi trabajo. Pero sobre todo, espero que te haya servido para reflexionar y replantearte un poco mejor por qué haces lo que haces, cuando comunicas.

 

Y por último, te aviso:

en poco tiempo, tendré un curso práctico para avanzar por ti mismo en tus textos de salud holística o integrativa.

Te lo cuento en mi suscripción:

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